La fotografía siempre ha sido una parte importante de la vida de Yone Estivariz. De pequeña la utilizaba meramente de manera instrumental, para guardar recuerdos y crear un archivo para la memoria. Ya de joven, acudió a la Escuela de Artes y Oficios a formarse, donde descubrió el mundo de la fotografía y el gusto por crear.
Continuó su formación en Arte Eskola, ahora IDarte, y en la escuela LSP de Londres. Encontró entonces su propio camino y enfocó su trabajo a la fotografía documental y propuesta social, labor que continúa realizando a día de hoy a través de su sello ‘Nimbo, lifestyle photography’. “Lo apunto todo en papeles, cuadernos y en el teléfono para tener un inventario de proyectos y de cómo quiero enfocarlos”, cuenta Yone.
En 2019 fue seleccionada por Artgia para realizar una residencia artística y a finales de ese mismo año fue una de las ganadoras de la beca EMart. “Este tipo de convocatorias en las que se visibiliza el trabajo de las mujeres artistas son muy importantes porque la participación femenina en museos y ferias es mínima, apenas un 11%”, afirma la fotógrafa.
La vitoriana ha sido además la ganadora de la última edición de FotoArte con la obra ‘La lenta adaptación del movimiento’. “Me encanta ese momento de caos, en el que tengo un montón de imágenes enfrente y no sé qué hacer con ellas, y de repente comienzo a ver cómo hay fotografías que de alguna manera han nacido para estar juntas, me parece lo más bonito”.